4 de abril de 2022

Diario de Santa Faustina,  136;2

 

(…) Y el Señor me dio a conocer que todo el misterio dependía de mí, de mi consentimiento voluntario a ese sacrificio con toda la conciencia de mi mente. En este acto voluntario y consciente está todo el poder y valor delante de su Majestad. Aunque no me sucediera nada de aquello a lo que me había ofrecido, delante del Señor es como si ya todo hubiera sucedido. (…)

 


 

 

No hay comentarios:

Publicar un comentario