30 de abril de 2023

Del Diario de Santa Faustina, 1572

 

"Te recuerdo, hija Mía, que cuántas veces oigas el reloj dando las tres, sumérgete totalmente en Mi misericordia, adorándola y glorificándola; suplica su omnipotencia para el mundo entero y especialmente para los pobres pecadores”.

 


 

 

 

29 de abril de 2023

Del Diario de Santa Faustina Kowalska, 1052

 

Oh Jesús mío, te pido por toda la Iglesia, concédeles el amor y la luz de Tu Espíritu, por fuerza a las palabras de los sacerdotes, para que los corazones endurecidos se vuelvan tolerantes y vuelvan a Ti, Señor.

 




 

28 de abril de 2023

Del Diario de Santa Faustina, 889

 

Oh Jesús, me das a conocer y entender en qué consiste la grandeza del alma: no en grandes acciones, sino en un gran amor. Es el amor que tiene el valor y él confiere la grandeza a nuestras acciones;
aunque nuestras acciones sean pequeñas y comunes de por si, a consecuencia del amor se harán grandes y poderosas delante de Dios gracias al amor. 

 


 

 

27 de abril de 2023

Del Diario de Santa Faustina, 895

 

Hoy no he tenido ganas de escribir; de repente he oído en el alma una voz: Hija Mía, no vives para ti, sino para las almas. Escribe para el bien de ellas. Conoces Mi voluntad en cuanto a escribir, te la han confirmado muchas veces los confesores. Tú sabes lo que mas Me
agrada y si tienes alguna duda sobre Mis palabras, sabes a quién debes preguntar. Le concedo luz para que juzgue Mi causa, Mi ojo lo protege. Hija Mía, frente a él tienes que ser como una
niña, llena de sencillez y sinceridad, antepón su opinión a todas Mis peticiones, él te guiará según Mi voluntad; si no te permite cumplir Mis solicitudes, quédate tranquila, no te juzgaré por ello; este asunto quedará entre Yo y él. Tú debes obedecer.

  



26 de abril de 2023

Del Diario de Santa Faustina, 913- 914

 

Durante la Santa Misa vi a Jesús crucificado. Jesús estaba clavado en la cruz y entre grandes tormentos.(...) Oh, qué misterios tan asombrosos ocurren durante la Santa Misa. (...) Un día sabremos lo que Dios hace por nosotros en cada Santa Misa y qué don prepara para nosotros en ella. Sólo su amor divino puede permitir que nos sea dado tal regalo.