3 de enero de 2022

Diario de Santa Faustina,  125; 1

 

 Hasta aquí se pudo soportar todo. Pero cuando el Señor me pidió que pintara esta imagen, entonces, de verdad, empezaron a hablar y a mirarme como a una histérica y una exaltada, y eso empezó a propagarse aún más. (…)

 


 

No hay comentarios:

Publicar un comentario