12 de diciembre de 2021

Diario de Santa Faustina, 116; 2

 

(…) Más de una vez mi alma gritó hacia Dios, como un niño pequeño grita con todas sus fuerzas cuando la madre tapa su rostro y él no la puede reconocer. Oh Jesús mío, por esas pruebas de amor, sea gloria y honor a Ti. Tu misericordia es grande e inconcebible. Oh Señor, todos Tus proyectos respecto a mi alma están llenos de Tu misericordia.


 

No hay comentarios:

Publicar un comentario