“La misericordia a la cual somos llamados abraza a toda la creación, que
Dios nos ha confiado para ser cuidadores y no explotadores, o peor todavía,
destructores”. Audiencia general interreligiosa del papa Francisco, miércoles
28 de octubre de 2015.
"A las almas que propagan Mi Misericordia, las protejo durante toda su vida como una madre cariñosa a su niño recién nacido y a la hora de la muerte nos seré para ellas, el Juez, sino el Salvador Misericordioso". Diario, 1075
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