Del Diario de Santa Faustina, 783
Tengo que vigilarme mucho, sobre todo hoy, porque empieza a envolverme una excesiva sensibilidad por todo. Las cosas que, estando yo de buena salud, no llamarían mi atención, hoy me irritan. Oh Jesús mío, mi escudo y mi fuerza, concédeme la gracia de salir victoriosa de tales circunstancias. Oh Jesús mío, transfórmame en Ti con el poder de Tu amor, para que sea un digno instrumento para proclamar Tu misericordia.
No hay comentarios:
Publicar un comentario