10 de marzo de 2022

Diario de Santa Faustina, 148; 3

 

 (…) (Tal alma) sigue fielmente el más pequeño soplo del Espíritu Santo, goza por este Huésped espiritual y se agarra a Él como un niño a la madre. Allí otras almas se detienen y asustan. Ella sigue adelante sin temor y sin dificultad.

 


 

No hay comentarios:

Publicar un comentario