15 de enero de 2022

Diario de Santa Faustina, 130;1

 

 Sin embargo empecé a descuidarme un poco. No hacía caso a estas inspiraciones interiores, trataba de distraerme. Pero a pesar del ruido y de las distracciones, veía lo que pasaba en mi alma. La Palabra Divina es muy elocuente y nada puede sofocarla. (…)

 


 

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