HORA DE LA DIVINA
MISERICORDIA: LAS TRES DE LA TARDE
La oración de las tres
dictada por Jesús a Santa Faustina Kowalska es la siguiente:
Expiraste, Jesús, pero
Tu muerte hizo brotar un manantial de vida para las almas y el océano de Tu
misericordia inundó todo el mundo.
Oh, Fuente de Vida,
insondable misericordia divina, anega el mundo entero derramando sobre nosotros
hasta
Tu última gota. Oh,
Sangre y Agua que brotaste del Corazón de Jesús, manantial de misericordia para
nosotros, en Ti confío.
El Señor le dijo a
Santa Faustina Kowalska lo siguiente: "Suplica a mi Divina Misericordia,
pues es la hora en que mi alma estuvo solitaria en su agonía, a esa hora todo
lo que me pidas se te concederá, (es la hora en que Jesús derrama sus gracias
especiales sobre toda la humanidad, aunque sea por un brevísimo instante
sumérgete en oración de preferencia, ora La Coronilla y Dios te llenará de
múltiples bendiciones), yo protegeré a todas las casas, ciudades y naciones
donde veneren mi imagen." "A todo aquel que rece La Coronilla
diariamente, le haré triunfador en esta vida y también en la otra, y a la hora
de su muerte yo vendré a acompañarle a bien morir en su último suspiro."
"Protegeré como una madre lo hace con su hijo a todo aquel que durante su
vida me venere, y nada de lo que me pidan a las tres en punto de la tarde les
será negado. A los sacerdotes que proclamen y ensalcen mi imagen y la difundan
y hagan conocer La Coronilla, les otorgaré un poder extraordinario y ungiré sus
palabras, y tocaré los corazones de aquellos con quienes hablen de Mí."
"Hablen de Mí todos aquellos que me conocen y difundan la enseñanza de La
Coronilla. Pido nuevamente que lo hagan a las tres de la tarde, a esa hora
derramaré sobre toda la humanidad que ore, un sin número de gracias, cubriré
con el agua de mi costado y con la sangre de mi corazón a todo aquel que a Mi
se acerque." El rayo blanco es el agua de Su costado, y el rayo rojo es Su
sangre derramada por los pecados del mundo. Todo el que se acerca a Él con fe y
se lo pide, cambia su vida.
No hay comentarios:
Publicar un comentario