9 de marzo de 2025

Del Diario de Santa Faustina, 1294

 

El Señor me ha enseñado que si un alma no acepta las gracias que le han sido destinadas, en ese mismo momento las recibe otra alma. Oh Jesús mío, hazme digna de recibir las gracias, porque por mi misma no puedo hacer nada, sin Tu ayuda no soy capaz ni siquiera de pronunciar dignamente Tu nombre. 

 

 


8 de marzo de 2025

Del Diario de Santa Faustina, 1767

 

No te aflijas si muchas veces tu corazón siente repugnancia y aversión por este sacrificio. Todo su poder está encerrado en la voluntad, por lo tanto los sentimientos contrarios no sólo no disminuyen este sacrificio a Mis ojos, sino que lo hacen más grande. Has de saber que tu cuerpo y tu alma estarán a menudo en el fuego. Aunque en algunas horas no Me sientas, pero Yo estaré junto a ti. No tengas miedo, Mi gracia estará contigo.

 


 

 

7 de marzo de 2025

Del Diario de Santa Faustina, 272

 

Sin humildad no podemos agradar a Dios. Ejercítate en el tercer grado de la humildad, es decir no solamente no recurras a explicaciones y justificaciones cuando te reprochen algo, sino que alégrate de la humillación.

 


 

 

6 de marzo de 2025

Del Diario de Santa Faustina, 72

 

Jesús, Verdad Eterna, Vida nuestra, Te suplico e imploro Tu misericordia para los pobres pecadores. Oh Sacratísimo Corazón, Fuente de Misericordia de donde brotan rayos de gracias inconcebibles sobre toda la raza humana. Te pido luz para los pobres pecadores.

 


 

 

5 de marzo de 2025

Del Diario de Santa Faustina, 1501

 

+ Como ahora no puedo dormir bien de noche, ya que no me lo permiten los dolores, visito todas las iglesias y las capillas y adoro, aunque sea por poco tiempo, al Santísimo Sacramento. Cuando vuelvo a mi capilla, entonces rezo por ciertos sacerdotes que proclaman y divulgan la misericordia de Dios. Rezo también según la intención del Santo Padre y para impetrar la misericordia de Dios para los pecadores; éstas son mis noches.

 


 

 

4 de marzo de 2025

Del Diario de Sta. Faustina Kowalska, 930

 

Oh Jesús mío, cuando vaya a Tu casa y me colmes de Ti mismo, y esto será para mi la plenitud de la felicidad, no olvidaré la humanidad; deseo levantar las cortinas del cielo para que la tierra no dude de la Divina Misericordia. Mi descanso está en proclamar Tu misericordia. El alma rinde la mayor gloria a su Creador cuando se dirige con confianza a la Divina Misericordia.

 


 

 

3 de marzo de 2025

Del Diario de Santa Faustina, 1495

 

Oh, qué bueno es invocar la ayuda de Jesús durante la conversación. Oh, qué bueno es impetrar para sí gracias actuales en los momentos de tranquilidad.