12 de junio de 2023

Del Diario de Santa Faustina, 1286

 

Te agradezco, oh Dios, por todas las gracias.

De las cuales me colmás continuamente, las que me iluminan como los rayos de sol, y con las cuales me indicas el camino seguro.

Gracias, oh Dios, por haberme creado, por haberme llamada a la existencia de la nada, y por grabar en mí Tu divino sello, y lo has hecho únicamente por amor.

(37) Gracias, oh Dios, por el santo bautismo, que me insertó en la familia divina, es un gran e inconcebible don de la gracia, que nos transforma las almas.

 


 

 

 

11 de junio de 2023

Del Diario de Santa Faustina, 411

 

En los momentos cuando me encuentro con Dios en la profundidad de mis entrañas, me siento tan feliz que no sé expresarlo. Estos momentos son cortos, porque el alma no los soportaría más, debería producirse la separación del cuerpo. Aunque estos momentos son muy cortos, no obstante su poder que pasa al alma permanece muchísimo tiempo. (...). Estoy unida a Dios tan estrechamente como una gota de agua con el océano sin fondo.

 

  



10 de junio de 2023

Diario de santa Faustina,1249

 

Hoy, en la adoración el Señor me hizo saber cuánto desea que el alma se distinga en el amor activo y vi en mi interior cuán grande es el número de almas que nos piden gritando: Dénos a Dios; y ardió en mí la sangre apostólica. No la escatimaré sino que la daré hasta la última gota por las almas inmortales; aunque, quizá, Dios no lo pida físicamente, pero espiritualmente esto es posible para mí, y no menos meritorio.

 


 

 

9 de junio de 2023

Del Diario de Santa Faustina, 106

 

Si el Señor quiere llevar un alma a través de tales sufrimientos, que no tenga miedo, sino que sea fiel a Dios en todo lo que depende de ella. Dios no hará́ daño al alma, porque es el Amor Mismo y por este amor inconcebible la llamó a la existencia. Pero cuando yo me encontraba angustiada, no lo comprendía.

 


 



 

8 de junio de 2023

Del Diario de Santa Faustina, 1439

 

Conocí más profundamente las tres Personas Divinas que contemplaremos durante toda la eternidad y después de millones de años nos daremos cuenta de haber apenas comenzado nuestra contemplación. Oh qué grande es la misericordia de Dios que admite al hombre a una participación tan grande en su divina felicidad.