Diario de Santa Faustina Kowalska 1233
Tú apoyas mi alma.
Tú que eres Todopoderoso y te encarnaste en una Virgen,
Ven escondido en mi corazón,
Y la potencia de mis sentidos no te alcanza.
Del Diario de Santa Faustina, 1397
El Señor me ha dicho: "La pérdida de cada alma Me sumerge en una tristeza mortal. Tú siempre Me consuelas cuando rezas por los pecadores. Tu oración que más Me agrada es la oración por la conversión de los pecadores. Has de saber, hija Mía, que esta oración es siempre escuchada".