21 de septiembre de 2021

Diario de Santa Faustina, 225; 1

 Algunos de mis propósitos.

 En lo que concierne a la confesión, elegiré lo que más me humilla y cuesta. A veces una pequeñez cuesta más que algo más grande. Antes de cada confesión recordaré la Pasión del Señor Jesús y con esto despertaré la contrición del corazón. Si es posible, con la gracia de Dios, ejercitarse siempre en el dolor perfecto. A esta contrición le dedicaré más tiempo. (…)

 


20 de septiembre de 2021

Diario de Santa Faustina, 225; 2

 

 (…) Antes de acercarme a la rejilla, entraré en el Corazón abierto y misericordiosísimo del Salvador. Cuando me aleje de la rejilla, despertaré en mi alma una gran gratitud hacia la Santísima Trinidad por este extraordinario e inconcebible milagro de la misericordia que se produce en el alma; y cuanto más miserable es mi alma, tanto mejor siento que el mar de la misericordia de Dios me absorbe y me da una enorme fuerza y fortaleza.

 


 

 

19 de septiembre de 2021

Diario de Santa Faustina, 167; 2

 

 (…) La querida Madre Maestra en seguida me preguntó si este año había hecho los ejercicios espirituales. Contesté que no. (Me dijo):"Pues, primero, tiene que hacer usted por lo menos tres días de ejercicios espirituales". Gracias a Dios, en Walendów había ejercicios espirituales de ocho días, así que pude aprovecharlos. Sin embargo empezaron las dificultades cuando se trató de ir a esos ejercicios. (…)

 


 

18 de septiembre de 2021

Diario de Santa Faustina, 224;1

 

Todos los momentos libres de los deberes los pasaré a los pies del Santísimo Sacramento. A los pies del Señor buscaré luz, consuelo y fuerza. Incesantemente mostraré el agradecimiento a Dios por la gran misericordia hacia mí, sin olvidarme jamás de los beneficios que me ofreció y especialmente la gracia de la vocación. (…)

 


 

 

17 de septiembre de 2021

Diario de Santa Faustina, 224;1

 

Todos los momentos libres de los deberes los pasaré a los pies del Santísimo Sacramento. A los pies del Señor buscaré luz, consuelo y fuerza. Incesantemente mostraré el agradecimiento a Dios por la gran misericordia hacia mí, sin olvidarme jamás de los beneficios que me ofreció y especialmente la gracia de la vocación. (…)